Historia del
Hace algunos miles de años el té era la bebida más consumida en el mundo después del agua y todavía lo sigue siendo. Para China el té durante milenios fue un arte, para Japón durante siglos fue una religión y para los británicos es un ritual diario. El té verde son hojas del arbusto Camelia sinensis que son vaporizadas o tostadas en una sartén tras haber sido recolectadas a fin de detener la ruptura enzimática de los polifenoles. Las hojas son enrolladas, retorcidas y secadas.

Hay tres tipos principales de té – verde, negro y oolong – cada uno de ellos procesado de forma diferente. Para hacer té negro, la hoja de té fresca es marchitada dejándola expuesta al aire, luego se rompe y se deja que fermente. El té oolong se trata de una forma similar, pero el proceso de marchitación es mucho más breve, lo que da como resultado una hoja semifermentada. En el té verde, la hoja no se fermenta para nada. En lugar de ello, se cuece al vapor inmediatamente después de la recolecta para detener el proceso de fermentación, luego se enrolla y se seca.
Los tipos de té verde más consumidos en el mercado son:


Oolong té mezclados con jazmines y pétalos de rosas producido por China y Taiwán.

Sencha es el tipo de té más popular en Japón. Se usa sencha de calidad superior sólo en ocasiones especiales, utilizando la calidad media a diario prácticamente en casi todos los hogares y puestos de trabajo.

Banchá, es un sencha de calidad inferior, de sabor picante hecho de las hojas grandes, toscas y viejas que se recolectan de la planta al final de la estación.

Hyson, té verde chino, está hecho de hojas viejas y pobres que son retorcidas y enrolladas. Pólvora son hojas de té verde de calidad superior, proceden de China y se enrollan formando pequeñas bolas.

Imperial contiene hojas viejas que son fabricadas al estilo de la pólvora, pero no están enrolladas tan fuertemente.